BAILE DEL SOL Sivumäärä: 120 sivua Asu: Pehmeäkantinen kirja Julkaisuvuosi: 2005, 02.05.2005 (lisätietoa) Kieli: Espanja
Estos relatos son un espacio y un tiempo, o tal vez ni lo uno ni lo otro porque dicen que la literatura es atemporal y tiempo nuevo al ser leída. Pero no voy a discutir sobre este tema y no es que la filosofía y la ontología de las cosas no merezcan la pena, pero están en otro paisaje. La verdad es que cuando concluí de transcribir las ideas del último borrador me inundó un sentimiento, o varios a la vez, de irresponsabilidad y uno más placentero. Me siento lleno. Abandono un vértigo demasiado conocido. ¿Verdad? No sé. La vida está ahí y aquí, más muerta que vida, e incluso con un pueblo que muere sin morir. A pesar de tantas cosas, y de muchas más que se nos escapan, la literatura no se descuida de existir. Grandes maestros del relato, y nuevas colecciones sobre el género, publican sus obras siendo aplaudidos y reeditados constantemente. Pienso de todos que modos que este primer volúmen de esta serie puede ser editado o quedarse como un grupo de folios unificado, y fosilizado, en una carpeta de mi estantería nueva llena de polvo, vigilada por el último póster de la última película de Clive Barker, o ser asesinados por una recopilación de relatos celtas, o por otra de la mejor ciencia ficción de los años 60. Libro adquirido en una feria del libro antiguo y de ocasión, en esos lugares del viaje y el tren sin reloj, en el Paseo de Gràcia de mi ciudad natal, o tal vez sean pateados por una antología de cuentos de Juan José Millas. En fin, si son rechazados, cosa que no es ninguna deshonra ni ninguna honra, puede que aparezcan desconsolados o alegres, en una de las revistas que me publican cuentos, o alguno de los relatos, con los meses, sea apadrinado con un premio de 1.000 euros y lote de libros de cualquier editorial con muchas ganas y fuerzas. Todo eso les puede ocurrir y ya es otro cuento, otro relato más en sus vidas, sueños, muertes, personajes y trances, pero seguro que, indiscutiblemente, quedarán, donde sea, FIGURANDO EN EL PAISAJE. El tuyo, el mío, el nuestro. Da igual.